Cada 23 de abril se celebra en España el día del libro (que coincide, en Cataluña, con la festividad de Sant Jordi).
He sido una lectora voraz desde que tengo memoria… Los libros han sido mi refugio, mis amigos, mis acompañantes en las calurosas tardes de verano y en las largas noches en vela.
De niña ya visitaba la biblioteca de mi pueblo con asiduidad (todavía recuerdo una saga de una jovencita llamada Trixie Belden que me gustaba mucho) y conforme fui creciendo, además de historias y novelas, fui incorporando otros géneros a mis lecturas: filosofía, psicología, espiritualidad.
Durante un tiempo, sobre todo coincidiendo con mi formación como coach y como terapeuta de la Biografía Humana, leía casi únicamente ensayos o libros prácticos, o sea, casi todas mis lecturas versaban sobre temas de coaching, planificación, productividad, desarrollo personal, gestión emocional, libros sobre la importancia de la infancia para nuestro desarrollo…
Fue una época muy prolífica y en este artículo recopilé algunos de los que fueron mis libros favoritos de este género.
Durante ese tiempo dejé un poco de lado las novelas. Consideraba (erróneamente) que mis lecturas tenían que «aportarme algo», que lo importante era «aprender cosas» útiles para mi propio proceso de autoconocimiento y mi desarrollo profesional.
Creo que entonces desconocía la importancia de las BUENAS novelas, y cómo un escritor sagaz es capaz de penetrar en muchos rincones del alma humana y, mediante una historia entretenida y conmovedora, mostrarnos el crecimiento o la caída de un personaje.
He leído novelas excelentes en los últimos tres años, de hecho me doy cuenta que tengo una especie de «imán» para atraer buenos libros y buenos escritores a mi vida (también es cierto que si empiezo un libro y no me dice nada, lo dejo de lado y paso a otra cosa).
Estas novelas me han atrapado, me han hecho sonreír, asombrarme y a veces también horrorizarme por el dolor o por la crueldad de los acontecimientos. Pero sobre todo, me han hecho aprender a través de los personajes y sus peripecias. Muchas veces he parado la lectura y he pensado: ¿y yo qué haría en esta situación?
Seguir el curso de las decisiones tomadas por un personaje en una buena novela, me ha hecho darme cuenta de cuáles son los buenos modos de actuar, los que nos acercan a una vida más plena y significativa, y cuáles son los errores de pensamiento, carácter o forma de obrar que nos van llevando al abismo…
Por todo ello, quería hablar en este audio de cuatro novelas que he leído últimamente y con las que no sólo he disfrutado de lo lindo porque el argumento era interesante y la prosa impecable ,sino de las que he aprendido, me he emocionado y he subrayado párrafos enteros porque me resultaban inspiradores.
Sé que estas novelas no son para todos los públicos y no quiero convertirlas en recomendaciones infalibles, pues están lejos de ser «best sellers» que gustan a cualquiera.
Pero espero que mis reflexiones te resulten interesantes y, sobre todo, que tú también te animes a leer buenas novelas porque son un alimento para la mente y para el alma.
Dale al Play y descubre mis recomendaciones (si no tienes instalada la App de ivoox usa la opción «reproducir en navegador«).
Notas del audio
Estas son mis cuatro recomendaciones.
- Los perros y los lobos, La presa y Jezabel de mi adorada Irene Nemirovsky, de la que no pierdo ocasión de hablar.
- Jungle Jean de Geralyn Gendreau, que narra la biografía impresionante de Jean Liedloff en la selva venezolana y sus aportaciones a la ciencia del comportamiento humano (que se materializaron en el libro El concepto del continuum)
- Zorba el griego, de Nikos Kazantzakis
- Madame Bovary de Gustave Flaubert
Por otro lado, si en este momento de tu vida te interesa más leer libros de desarrollo personal, aquí tienes una recopilación de los que más me marcaron.
Y también quiero comentarte que el año pasado publiqué mi primera obra sobre cómo tomar buenas decisiones sin caer en la angustia y el miedo a lo que pasará. Si el tema te interesa, te invito a ver esta entrevista en vídeo donde hablo de las ideas principales de mi libro.
¡Feliz día del libro!