Cuando algo en la vida no es como queremos, y sobre todo si no está en nuestra mano cambiarlo (o es complicado) aparece la frustración.

¿Cómo puedo tolerar algo que no me gusta pero que no me queda más remedio que tolerar en este momento? Ajá, menuda pregunta…

Hace unos días Leticia, después de adquirir mi masterclass, me escribió para plantearme esta cuestión que me pareció tan interesante como para dedicarle este artículo. Copio su pregunta literal:

¿Qué pasa si estás haciendo algo que realmente no te gusta pero tienes que hacerlo porque no te queda más remedio? {refiriéndose a un trabajo} ¿Cómo superas el tener que aguantarte?

¿Cómo se hace esto sin caer en el enfado o la depresión, eh?

Otras veces la frustración viene porque queremos alcanzar una meta pero el precio de hacerlo es demasiado elevado y eso nos desmotiva, y nos cabrea; nos preguntamos ¿pero por qué es tan difícil conseguir eso? ¿Por qué no podría tenerlo más fácil?

En otros casos lo que nos desespera es tener que renunciar a cosas: ¿por qué no puedo tener tiempo para TODAS mis aficiones? ¿por qué no puedo conciliar mi trabajo de ejecutiva con mi reciente maternidad? ¿por qué no puedo sacar adelante mi casa, mi familia, un trabajo por cuenta ajena y un blog, oh, por qué, por qué el día sólo tiene 24 horas?

Por último, están esas situaciones de la vida que nos cuesta aceptar y creemos que si les damos muchas vueltas en la cabeza encontraremos una solución, como todo lo relacionado con la necesidad de más dinero: queremos viajar más, vivir en un piso más grande, comprar obras de arte o ropa más bonita pero con nuestro presupuesto ajustado no nos da ni para cubrir una décima parte de nuestros deseos y ¡OH, QUÉ FRUSTRANTE! ¿Cómo se supera esto?

Supongo que te habrás identificado en alguno de estos casos ¡o en todos! Bien, si es así no te preocupes porque en este artículo voy a compartir 4 maneras de tolerar estas frustraciones de la vida, espero que te ayude.

Vamos allá:

Cómo superar la frustración de que las cosas no sean como tú quieres

 

1. Aceptar y asumir las cosas que no se pueden cambiar

Esta es mi primera recomendación para gestionar la frustración: si hay algo en tu vida que NO puedes hacer nada para cambiar por medio de la voluntad, tienes que aceptar que es así…

Y lo sé, aceptar es durísimo, no estamos acostumbrados a simplemente dar algo por hecho, «rendirnos» en cierta manera y decir: bueno, así es, lo acepto y no voy a invertir mis energías (ni siquiera mentales) en querer que sea de otra manera. Pero a veces, esta es la única alternativa posible.

El problema aquí está en diferenciar lo que podemos cambiar de lo que no, porque tampoco se trata de ser derrotistas y conformarnos con cosas que sí estaría en nuestra mano modificar.

Es por ello que me parece acertadísima esta oración de la serenidad atribuida a Reinhold Niebuhr y utilizada por muchos grupos terapéuticos de todo el mundo:

Señor, concédeme la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar,
el valor para cambiar las cosas que puedo cambiar
y la sabiduría para distinguir entre ambas.

Como digo, a veces no es fácil saber si es momento de simplemente aceptar y dejar que las cosas sean así o hacer un intento más de cambiarlas. Lo que podemos hacer es seguir preguntándonos o ir probando, ¡y aceptar también que a veces NO sabemos las respuestas, o no hay respuestas fáciles, y no pasa nada!

Pero por hablar de algo concreto, una preocupación bastante frecuente (e irresoluble) sobre todo conforme vamos entrando en años es el paso del tiempo. Envejecer es un frustración recurrente para muchas personas… Y aquí sí que no hay duda ni dilema: entra en ese grupo de cosas que es imposible revertir, así que mejor es asumirlo y aceptarlo, rendirnos, dejar de luchar y de enfadarnos por cumplir años.

Otras cosas que no se pueden cambiar son nuestra familia de origen, la ciudad en que hemos nacido, nuestra raza, algunos atributos físicos y todo lo relacionado con el pasado (errores, alegrías que pasaron, decisiones que cambiaron nuestra vida).

Así que si alguna de estas cosas en particular se come tu energía vital y te sigues enfadando porque no es como te gustaría, te aconsejo que hagas un ejercicio profundo de serenidad y aceptación.

Cómo gestionar la frustración - aceptar el pasado

Saca todo tu enojo, llora todo lo que tengas que llorar, haz el duelo, perdónate, maldice al universo una vez más pero PARA, para de una vez y déjalo ir porque no merece la pena seguir en este camino de lucha estéril.

O bien, haz lo que digo en el paso 2.

 

2. Conocer e indagar sobre el problema

Hay un consejo bastante extendido que dice que, ante un problema cualquiera, o hacemos algo para mejorarlo o lo asumimos, pero de nada sirve quejarnos una y otra vez.

Bueno… no estoy del todo acuerdo. Primero porque tampoco está mal quejarnos de vez en cuando, y segundo porque hay una tercera vía de acción que no es ni actuar de inmediato ni conformarnos: el conocimiento.

Creo que esto es válido sobre todo para asuntos que nos afectan a nivel social o político y en los que no podemos actuar directamente. Por ejemplo la corrupción de nuestros gobiernos, la contaminación, la mala calidad de la comida, la explotación infantil, las pésimas condiciones laborales o el precio inasequible de la vivienda.

Todos estos problemas son tan ENORMES y no dependen directamente de nosotros que nos encontramos en una situación de cierto desvalimiento: «vaya, a menos que me meta a político o sindicalista, no puedo hacer nada para solucionar esto» pero sí, está esta tercera vía ¡la de informarnos y formarnos!

Cuando un problema sea tan grande que no sepas cómo abordarlo, pero tengas interés en él y entiendas que hay un pequeño margen de maniobra individual, prueba durante meses, incluso años, a buscar información sobre ese tema y conocer la verdad.

Estamos tan acostumbrados a querer tener la solución a un dilema de inmediato que obviamos que muchos inventos, grupos humanitarios, soluciones, han surgido a lo largo de AÑOS en que personas han persistido en ese interés.

Por ejemplo, ahora hay bastantes posibilidades de comprar cosmética, alimentos o moda sostenible y eso es porque en su día ciertas personas decidieron ni conformarse ni actuar de inmediato de manera impulsiva, sino empezar a investigar y observar la realidad, recopilar datos, buscar formaciones alternativas y después crear su fórmula y comercializarla. Esto es hacernos cargo de nuestro poder.

Dejando a un lado estas cuestiones colectivas, ¿cómo puedes aplicar este punto de «buscar información  y formarte» a tu caso personal, a un problema complejo que te frustra y querrías resolver, pero que no puedes hacerlo en un sólo paso?

Lo expliqué en este artículo: Qué hacer si te sientes abrumado por muchos problemas a la vez y la respuesta es esta: invierte días, semanas, no es pensar «qué hago» sino en indagar sobre ese problema, en conocerte, en pensar cuándo te ocurrió y por qué, en simplemente leer textos que te abran la mente y te hagan adquirir sabiduría. Y confía en que, por el camino, se te van a ir ocurriendo alternativas que ahora ni contemplas porque te faltan ciertos conocimientos y experiencias.

O sea, no caigas en la impotencia: si no puedes hacer nada en este momento para remediar una situación sí que puedes aprender sobre ella.

Voy a repetir otra vez esta frase, poniéndola en grande, porque puede ser que esta acción de aprender te traiga más alivio y confort de lo que pueds imaginar:

Si no puedes hacer un cambio externo para remediar una situación que no te gusta, al menos puedes APRENDER e INDAGAR sobre ella.

 

El conocimiento es poder. No sabes cuánto me gusta esta frase.

 

3. Aprender a renunciar sin dolor

Muchas veces la frustración viene de sentir que no tenemos tiempo, dinero, atención o energía para hacer todo lo que nos gustaría hacer. Si eres una persona con muchas pasiones y deseos, seguro que esto te pasa a ti.

La realidad es que vivimos en una época tan abundante en estímulos, con tantas opciones interesantes de cosas que hacer, leer, visitar, experimentar, etc. que resulta doloroso admitir que no tenemos tiempo ni dinero para hacer tooodo eso que nos gustaría y sería posible hacer.

Esto causa mucha, mucha frustración.

¿Cómo conciliar muchos hobbies diferentes si te gustan todos y aparte tienes obligaciones que atender? Pues dejando de pensar en el «cómo lo hago» y admitiendo que sencillamente no se puede y que tienes que priorizar.

Sí, así de claro: la única salida es renunciar y priorizar.

Querer meter en un día tropecientas actividades al final te va a llevar a la sobrecarga y al estrés (y a frustrarte, además, porque no llegas a todo ¡pero es que no se puede!)

¿Qué hacer si te gustaría visitar todos los lugares de la Tierra pero tienes un presupuesto limitado? Pues elegir los que sean más relevantes para ti en ese momento y los demás… postergarlos para otro momento.

Si el no tener tiempo/dinero suficiente te genera mucho enfado en tu día a día, te aconsejo que pongas en práctica este ejercicio de «minimalismo existencial»: igual que no resulta saludable tener doscientos pares de zapatos o doce vajillas diferentes (a menos que sean realmente tu pasión o los colecciones) tampoco lo es tener una lista de intereses interminable que te haga siempre sentir que «no llegas a todo».

Porque aquí está la buena noticia: igual que cuando limpias y despejas tu casa te sientes más a gusto en ella, igual que cuando compras menos pero mejor (cosas de mayor calidad y con conciencia) tu vida y la de los demás se embellece, cuando priorizas tus actividades e intereses disfrutas más de lo que SÍ haces.

Ésa es la ventaja de perseguir pocas cosas a la vez: que puedes cumplir con ese propósito y además, lo disfrutas intensamente.

Trato con más detalle este tema en mi artículo: Decir que no, el hábito para vivir con menos estrés, te dejo por aquí el enlace por si quieres revisarlo.

 

4. Buscar ferozmente tu felicidad y bienestar en aquéllo en lo que sí puedes influir

Por último, otra manera de combatir la frustración que nos genera el tener que «aguantar» algo que no nos gusta pero no nos queda más remedio que aguantar es buscar ferozmente la felicidad… en otro lado.

Volviendo al ejemplo de Leticia que mencionábamos arriba, si nos gustaría dejar nuestro trabajo pero en el momento presente no podemos hacerlo (porque no hemos encontrado otra cosa, necesitamos el dinero, o necesitamos un tiempo para simplemente aclarar qué queremos hacer y cómo) mejor es invertir todas nuestras energías en crear una vida lo más estimulante y hermosa posible fuera del trabajo.

Y a esto me refiero con «ferozmente»: a utilizar el enojo que trae la frustración en mejorar nuestra vida.

Porque la rabia es una emoción energética, que nos activa, así que con ese subidón de energía podemos aprovechar para pensar cambios y llevarlos a cabo.

Otro caso, si tienes un problema de salud grave que te obliga a estar en cama un tiempo, o te impide hacer actividades que te encantan, no caigas en la trampa del conformismo o en la de pasarte todo el día enfadado con el mundo y no hacer nada: utiliza esa rabia para pensar con creatividad en todo eso que sí puedes hacer y lee los libros más apasionantes del mundo o saca tu lado creativo o deléitate con placeres cotidianos (la cocina, un baño, un paseo, hacer perfumes) para los que antes no tenías tiempo.

Un último ejemplo, si eres una persona con muchas inquietudes pero un presupuesto ajustado, bien, estrújate la cabeza día y noche hasta encontrar alternativas que te lleven a vivir una vida abundante con poco dinero: busca actividades gratuitas o muy económicas, benefíciate de bibliotecas y programas estatales, convierte ahorrar en un juego, disfruta del sol, la naturaleza y las maravillas que encuentras sin coste en Internet, y hasta que no encuentres alternativas que te gusten no ceses en tu empeño de buscarlas.

Como ves, el punto en conexión en todos estos ejemplos es utilizar esa rabia, esa energía, sacar el FUEGO que llevamos dentro no para despotricar por nuestra mala suerte, sino para construir la mejor vida posible.

Y sí, todos tenemos esa creatividad y ese fuego voluntarioso dentro, de hecho nos sale en forma de agresividad…

Entonces, utilicemos el enfado con más sabiduría y dando un puñetazo en la mesa, digamos: «Sí, esta situación no la puedo cambiar y no me queda otra que aguantarme pero, en compensación, voy a hacer esto otro ¡y sí, por mis «narices» que voy a ser feliz!»

Cómo gestionar la frustración - busca tu felicidad en aquello que depende de ti

 

Resumiendo: Cómo gestionar la frustración

En definitiva, ¿qué te propongo si te sientes frustrado porque ciertas cosas de la vida no son como tú quieres o no está en tu mano cambiarlas?

  1. Aceptar y asumir con serenidad lo que de ninguna manera puedes modificar
  2. Conocer e indagar sobre ese problema, porque el conocimiento SIEMPRE es poder
  3. Aprender a renunciar y enfocarte en lo prioritario, no quieras hacerlo TODO porque esto te llevará a estar insatisfecho siempre
  4. Buscar ferozmente tu felicidad y bienestar, a pesar de las circunstancias adversas que te rodeen

 

Espero que este artículo te haya ayudado y te haya dado una nueva visión sobre cómo salir de la frustración. Tengo que decir que yo he disfrutado mucho escribiéndolo e incluso a mí me ha servido para aclarar mis ideas 🙂

Así que bueno querido lector, querida lectora, vamos con coraje a hacer todo lo que esté en nuestra mano para llenar nuestras vidas de verdad, amor y bienestar. Y lo que no se pueda cambiar de ningún modo… dejémoslo ir, con serenidad.

Ahí una receta cortita para la vida 😉

 

 


¿Te gustó este artículo y quieres recibir algunos más en tu correo electrónico? Entonces únete a mi club de los sábados: es inspirador, gratuito y, si aplicas alguna de las recomendaciones, te puede cambiar la vida 🙂

 

Amparo María Millán Ocaña te informa que los datos de carácter personal que me proporciones rellenando el presente formulario serán tratados por mí como responsable de esta web. Finalidad de la recogida y tratamiento de los datos personales: gestionar el alta a esta suscripción y remitir boletines periódicos con información y oferta prospectiva de productos o servicios propios y de terceros afiliados.  Legitimación: Consentimiento del interesado. Destinatarios:  Mailchimp. Ver política de privacidad de Mailchimp.  Derechos: Podrás ejercer tus derechos de acceso, rectificación, limitación y suprimir los datos en info@puedoayudarte.es. Puedes encontar más información sobre Protección de Datos en mi página web, así como consultar mi política de privacidad.

¿Te gustó este artículo?

Recibe los siguientes en tu correo

30 Comentarios

  1. Feliz Sábado!
    Me ha gustado muchísimo tu artículo,me ha dado en que pensar.
    Gracias

    • Buenos días!!! Me ha gustado mucho este artículo. Me ayuda a llevar con mucha paciencia una situación familiar que estoy pasando en estos momentos, además de como se encuentra nuestro país actualmente. Muchas gracias por ser siempre tan atinada en tus artículos, muchas veces los releo; saco nuevas conclusiones o soluciones por cualquier cosa que me esté sucediendo o para ayudar a un familiar o amig@. Te envío abrazos y besos desde Venezuela, seguimos en la lucha esperanzadora. Muchas gracias!!!!

      • Amparo Millán Responde

        Ay querida Nurielle, qué alegría me dan tus palabras y cómo os acompaño a los venezolanos!!
        Y sí, la familia es una de esas cosas que no elegimos y a veces hay que ACEPTAR que esto es así y dejar de luchar inútilmente para amoldarnos o que las cosas cambien… Se trata de emplear esa energía de la furia en cosas que sean constructivas para nosotros (y no dejar que nos manipulen, a veces ciertas personas de nuestra familia nos piden que nos posicionemos y la verdad que no está en nuestra mano cambiar esto…) Por si quieres revisar un poco más sobre estos temas de nuestra influencia en la vida de los demás, te dejo este otro texto: Cómo ocuparte de tus asuntos y dejar de inmiscuirte en la vida de los demás
        Lo dicho, me alegra mucho que este artículo te haya ayudado y espero que cuando lo releas vuelvas a encontrar más inspiración.
        Un fuerte abrazo!

    • Amparo Millán Responde

      Qué bien Sandra, muchas gracias por hacérmelo saber!! 🙂

  2. Muchas gracias por tus post,este en especial pues estoy en el proceso de aprender a manejarlo de una manera diferente de otra perspectiva más positiva… excelente día…

    • Amparo Millán Responde

      Hola Yasna!
      Como bien dices, tenemos que enfocar este tema de renunciar y aceptar desde una perspectiva más positiva… No sintiéndonos frustrados por lo que NO podemos hacer o no podemos cambiar sino enfocándonos en lo que SÍ podemos hacer (buscar felicidad por otro lado, conocer, priorizar…) Un abrazo!

  3. Me ha gustado mucho este articulo pero aun estoy en el meollo de que dejar y que perdurar, tengo una mala imagen de mi, aunque hago cosas que me gustan sigo sin disfrutarlas, como cambiar mi imagen para tener tiempo para los demas y reirme de mi mismo, en lugar de estar siempre serio.

    • Amparo Millán Responde

      Hola Xavier,
      Comentas tantas cosas y tan diferentes en el artículo que es imposible responderte.
      Yo te diría: céntrate sólo en UNA COSA que quieras cambiar (por ejemplo, empezar a disfrutar más de la vida) y deja las demás de lado hasta que no consigas esa.
      Esto tiene mucho que ver con lo de renunciar y priorizar.
      Si quieres un texto específico sobre cómo poner más magia y pasión en tu vida cotidiana, te recomiendo leer y aplicar lo que digo aquí –> https://www.puedoayudarte.es/anadir-magia-a-tu-vida-cotidiana/

      Saludos!!

  4. Cindy Francis Núñez Responde

    Muchas gracias! Amparo me encantan tus artículos y siempre los espero cada mañana de sábado..
    Me han ayudado bastante en la situación difícil que estoy atravesando …
    Saludos desde Costa Rica!!

    • Amparo Millán Responde

      Querida Cindy, cuánto me alegra saber que me leen desde Costa Rica! 😀
      Me alegro mucho que te gusten estos artículos y los disfrutes cada sábado, pero sobre todo, que estés poniendo cosas en práctica para salir de esa situación difícil… Mucha paciencia y mucho ánimo, un abrazo!

  5. Carmen María Responde

    Amparo, siempre inspiradores tus artículos. Lo que más me gusta de tí y tus aportaciones es que son auténticas, que no están alejadas de la realidad. Quiero decir que muchos bloggers suenan a resumen de libro, tú suenas a verdad.
    Tengo además la suerte de conocer a Amparo en persona y toda ella es coherencia. Gracias!! Ciudad Real te echa de menos!!! Besos.

    • Amparo Millán Responde

      Carmen!!! <3 <3 <3 <3
      Bueno, qué decir a este comentario! Sí, a mí siempre me gusta hablar desde la vida REAL, lo que yo siento, lo que sienten mis amig@s, las preocupaciones cotidianas de quien vive en este mundo (complejo y difícil, a veces)... Así que me encanta que esto se perciba.
      Un abrazo grande querida, espero que te vaya todo muy muy bien. muak!!

  6. Estoy muy de acuerdo con todo lo que he leído,pienso que cada uno de nosotros nos configuramos y nos reiniciamos segun la situacion y momento, sin tener en cuenta que todo segira igual cuando nos volvamos a conectar.

    • Amparo Millán Responde

      Hola Ángel, me alegro que este artículo te haya dado nuevas respuestas y cosas en qué pensar.
      Creo que es vital,como dices, configurarse y adaptarse a la situación que estamos viviendo, aunque no nos guste.
      Gracias por comentar y un abrazo!

  7. Hola Amparo..es de muchísima ayuda contar con alguien como tú,sobre todo cuando atravesamos por situaciones familiares o personales que nos desestabilizáan emocionalmente y perdemos el timón de nuestra vida por un momento..tus artículos me son de gran ayuda siempre,y este más aún porque efectivamente..a veces nos es muy difícil dejar ir lo que ya no nos ayuda..mil gracias por escribir tan acertados artículos..y nunca pierdas esa inspiración por favor!!

    • Amparo Millán Responde

      Querida Flor, muchas gracias por tan bonitas palabras! Yo también espero que esta inspiración dure para siempre, me encanta hacer lo que hago, jajaja.
      Como tú dices, es realmente difícil dejar ir lo que ya no nos ayuda o incluso lo que no podemos solucionar… A veces la mejor actitud tiene que ver con la RENDICIÓN. Decir, ya no puedo más, suelto esto, dejo de buscarle una solución, voy a enfocarse en otra cosa. Pero trae tanta paz y liberación hacer esto.
      Te mando un abrazo y espero que seas capaz de soltar esas situaciones personales que te desestabilizan y te impiden ser tú.

      • Hola Amparo,buen día desde Acapulco,México !..gracias por responderme..y como siempre,esperamos tu nuevo artículo para seguir enfocando nuestros objetivos y planes de vida..un abrazo y excelente sábado!!

  8. Hola, Amparo.
    Me alegra escribirte, y de paso te agradezco por el artículo. Me vino muy bien el leerlo, y más hoy. Saludos cordiales.

    • Amparo Millán Responde

      Vaya Maricarmen, me alegro mucho!
      Mucha gente tiende a decirme que le llegan mis artículos en un momento muy indicado, será que todos estamos conectados…? Un fuerte abrazo!

  9. En reiteradas ocasiones he leído artículos al respecto, pero por primera vez siento que de verdad lo puedo aplicar en mi vida cotidiana. Gracias Amparo cada que leo un artículo tuyo te siento cerca, admiro y valoro la forma tan certera y coloquial como escribes que permite mantenernos en la lectura y calar de manera que me lleva a aplicar al pie de letra tus recomendaciones y consejos-Te dejo un abrazo y mi mayor buena energía desde Barranquilla Colombia- en pleno carnaval.

    • Amparo Millán Responde

      Querida Belinda,
      Muchas gracias por comentar y por tus bonitas palabras, qué hermosa energía la de Barranquilla en Carnaval! 😀
      Me alegra mucho que mis palabras te lleven a APLICAR mis consejos, eso es lo importante, que no nos quedemos leyendo y ya (puede ser muuuy adictivo leer textos y libros de motivación) sino que de a poco y con mucha amabilidad vayamos haciendo cambios a partir de esas cosas que leemos… Gracias por leerme, un abrazo de vuelta!

  10. Hola Amparo, afortunadamente no estoy ahora en situación de frustración o depresión, pero lo he estado durante un largo periodo y sé lo que cuesta, primero aceptarlo y luego superarlo. En este momento he aprendido a elegir las cosas que me benefician y dejar pasar lo que no me hace sentir bien, y me doy cuenta de que ese periodo «malo» no ha sido en balde. Todas las situaciones de la vida aportan algo, que luego te sirve para crecer como persona. Por eso, cuando van pasando, las aceptas como aprendizaje para seguir adelante. El hecho de leer tus artículos, aporta un valor añadido a mi vida. Muchas gracias.

    • Amparo Millán Responde

      Cuánto me alegro que hayas superado el bache, atri!
      Como dices, solamente al final podemos percibir cuánto BIEN ha hecho un período difícil a nuestra vida… Con lo que tenemos que quedarnos es con eso para que, otra vez que atravesemos una situación complicada, no caigamos en el desaliento.
      El artículo de hoy habla en general de aceptación, de soltar expectativas, de no frustrarnos si tenemos un período malo y acercarnos a qué tiene para enseñarnos. Tú lo has aprendido en la práctica así que enhorabuena 😉 Un abrazo!

  11. Hola, gracias por el post, es cierto que no vamos a ninguna parte cuando solo nos preocupamos por un problema, yo siento que cuando comienzo a buscar y a enfocarme en una solución parece como si estuviera creando nueva energía que me saca de ese laberinto sin sentido.

  12. Me parece bien tocar este tema, creo que hoy día somos muchas las personas que nos encontramos frustradas ante situaciones que tal vez tenemos las soluciones, pero no sabemos como afrontarlas ni siquiera dar el primer paso.
    A mi me esta sucediendo ahora mismo y es con respecto a mi relacion amorosa no la puedo cambiar porque lo acepté con las condiciones que tenía mas me siento frustrada porque no se si es lo que realmente quiero.
    saludos

    • Amparo Millán Responde

      Hola Yinet,
      Por lo que cuentas de tu situación amorosa, lo que te hace sentir frustrada es la indecisión, el no saber si dejar o seguir con esta relación. Cuando nos pasa esto, que nos bloqueamos ante una decisión, a veces lo mejor es no obsesionarnos con decidir nada… simplemente dejar estar la situación, seguir amando, aprendiendo, observando, sin PRESIONARNOS por elegir nada. Quizás no es el momento en que tengas que «saber qué hacer» con esta pareja, quizás sólo es el momento de experimentar, disfrutar y aprender.
      Espero que esta visión te sirva.
      Abrazos!

      Amparo.

  13. Hola!
    He disfrutado mucho leyendo tu artículo. Creo que podemos sacar lo mejor de tu situación es un gran consejo, me recuerda al caso de Jason Becker. Gracias por tus palabras y seguiré disfrutando de tus artículos.
    Saludos!

  14. Pingback: Todo lo que nos pasa nos pertenece – ¿Eres víctima o responsable? – bettyelane.com

Escribe un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.